Después de que se hiciera pública la planilla del personal permanente del Congreso, la cual da cuenta de mil 700 empleados, con salarios de entre Q5 mil y 76 mil mensuales, distintos diputados consideraron necesaria la congelación de contrataciones bajo el renglón 011, para evitar el colapso de las finanzas de ese organismo.
Selvin García, subjefe de Compromiso, Renovación y Orden, indicó que también es imprescindible hacer una reclasificación del personal y establecer un tope a los sueldos, pues ese aspecto no está regulado en el pacto colectivo suscrito con los trabajadores, el cual les otorga un incremento anual del 10 por ciento.
Tal apreciación fue compartida por el contralor general de Cuentas de la Nación, Carlos Mencos, e indicó que se solicitó información al respecto a las autoridades legislativas.
Opiniones divididas
Xiomara Conde, secretaria general del sindicato minoritario del Parlamento, se manifestó a favor de la transparencia, y calificó de positiva la difusión de la información, mientras que Alfredo Tumax, del ente que aglutina a la mayoría de los empleados, se dijo inconforme, por considerar que esto pondría en riesgo la integridad de sus afiliados, “quienes podrían ser víctimas de la delincuencia”.
De acuerdo con Nineth Montenegro, de Encuentro por Guatemala, en 2012 había un registro de mil 390 trabajadores permanentes, lo cual representaría un aumento de 310, cuyo último grupo se habría presupuestado durante la administración de Luis Rabbé.
Entre estos se encontraría Francisco Ballesteros, separado ayer del cargo de director general, y contra quien se iniciará el proceso de despido, según Mario Taracena, presidente del Congreso.
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