Sebastián Toledo
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En el marco de los Juegos Paralímpicos que se realizan en Tokio, Japón, el movimiento mundial de personas con discapacidad, lanzó la campaña WE THE 15 “SOMOS 15”, en alusión al 15 por ciento de los habitantes del mundo que vive en condición de discapacidad.
Una iniciativa que surge para dar visibilidad a los derechos y libertades fundamentales de los más de mil millones de seres humanos, que por diferentes circunstancias presentan deficiencias físicas, sensoriales, intelectuales y mentales que impiden el libre ejercicio de derechos.
En estudios de los organismos mundiales, se ha constatado que el 80 por ciento de esta cantidad vive en los países de bajos ingresos económicos, por lo que alrededor de 90 millones se encuentran en América Latina, de los cuales, 1 600 000 son guatemaltecos/as. Donde alrededor del 62 por ciento habita en las áreas rurales del país y el 38 por ciento en centros urbanos, en medio de marcadas cifras de marginación y discriminación.
En el contexto de las justas deportivas más importantes para los atletas con discapacidad de alto rendimiento, las sedes de organismos deportivos, de derechos humanos, culturales y políticos del mundo se identificaron con color violeta, distintivo de las personas con discapacidad.
En el contexto de las justas deportivas para los atletas con discapacidad de alto rendimiento, se identificaron con color violeta, distintivo de las personas con discapacidad.
Un acto con el que se da inicio a una campaña de 10 años, que además de pretender el empoderamiento del sector sobre sus derechos, lanza la motivación para un trabajo a través de coaliciones multisectoriales por los derechos de un sector altamente marginado de la agenda del desarrollo humano.
A partir de este año a 2030, las organizaciones de personas con discapacidad, gobiernos, entidades privadas, sociedad civil y agencias de cooperación deberán unificar recursos para hacer valer las demandas del sector más grande del mundo en marginación.
Acción que plantea todo un desafío, sobre todo, porque habrá que revisar y actualizar políticas, programas y servicios, a manera que sean accesibles y asequibles en igualdad de condiciones.
Los más de 5000 atletas con discapacidad que se dieron cita en los Juegos Paralímpicos de Tokio, a una voz demandaron que se dé cumplimiento a la Convención de las Naciones Unidas en materia de discapacidad, para reducir las desigualdades e inequidades que ha enfrentado esta población a lo largo de la historia.