EFE
La Justicia argentina celebra este lunes una audiencia preliminar de uno de los dos juicios por la muerte de Diego Maradona y se espera que se fije una fecha de comienzo del juicio por jurados contra la enfermera Gisella Dahiana Madrid, la única de los ocho acusados que solicitó un proceso mediante esta modalidad.
La audiencia de este lunes tiene lugar en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) número 3 de San Isidro, en la provincia de Buenos Aires y es previa al comienzo del juicio por jurados contra Madrid, acusada de “homicidio simple con dolo eventual” por su proceder mientras cuidaba a Maradona antes de su muerte en noviembre de 2020.
“La audiencia de hoy es importante porque debería fijarse la fecha, deberían fijarse los testigos que van a deponer en el juicio por la muerte de Maradona, los cuales nos van a dar luz de cómo lo mataron a Maradona y por qué”, dijo a la prensa Rodolfo Baqué, abogado de Madrid, antes de ingresar al recinto.
Por su parte, Fernando Burlando, el abogado que representa a las hijas del fallecido exfutbolista, describió a la enfermera como “un eslabón de esta cadena de criminales que asesinaron a Diego”.
“Hay cuestiones que uno en un paciente de estas características, psiquiátrico, no puede dejarse libradas al azar salvo que haya algún tipo de intención”, agregó, sobre el accionar de Madrid.
La Cámara de Casación Bonaerense estableció, el 2 de octubre pasado, que la responsabilidad por la muerte de Maradona se definirá en dos instancias: una por jurados contra la enfermera, a pedido de su abogado Rodolfo Baqué, y otro técnico para el resto de los siete acusados, que está previsto para el 11 de marzo de 2025.
Los otros siete imputados son el neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Díaz, el enfermero Ricardo Omar Almirón, el médico clínico Pedro Di Spagna, la médica Nancy Forlini, que coordinaba los cuidados domiciliarios del exfutbolista, y el coordinador de enfermeros, Mariano Perroni.
Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020, 25 días después de cumplir 60 años, como consecuencia de un “edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada”, según la autopsia, y se descubrió en su corazón una “miocardiopatía dilatada”.
