El Gobierno de Guatemala, presidido por Bernardo Arévalo, expresó este viernes “su grave preocupación”, por los recientes ataques contra la Fuerza Provisional de Naciones Unidas (FINUL) en el Líbano.
Guatemala calificó el ataque sobre las tropas de casos azules como “una grave violación al derecho internacional humanitario establecido en el consejo de seguridad de Naciones Unidas”, de acuerdo con un comunicado emitido por la Cancillería.
Dos oficiales guatemaltecos se encuentran destacados en el FINUL y ambos se “encuentran sin novedad”, indica el comunicado y pide a las partes involucradas en el conflicto “respetar la seguridad del personal”.
En su comunicado, el Gobierno guatemalteco no menciona a Israel, a quien Naciones Unidas ha atribuido los ataques que llevan tres días consecutivos, dejando al menos nueve integrantes de la misión con heridas.
El portavoz del Ejército israelí Nadav Shoshani aseguró que el Ejército había sido “notificado de que dos cascos azules de la ONU resultaron heridos (hoy) de forma involuntaria durante combates del Ejército contra Hizbulá en el sur del Líbano”.
Además, insistió en que las tropas “toman todas las precauciones para minimizar el daño tanto a civiles como a cascos azules” y precisó que se está llevando a cabo “una revisión exhaustiva en los más altos niveles de mando para determinar los detalles”.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, dijo que el ataque de Israel del jueves contra la FINUL en el sur de Líbano, que dejó heridos a dos cascos azules indonesios, es “una violación de la ley humanitaria internacional”.
Guterres afirmó que en sus años como secretario general de la ONU no ha visto tanta “muerte y destrucción” como en la guerra en la Franja de Gaza con una escalada y regionalización del conflicto que se está convirtiendo en “una amenaza para la paz y la seguridad” mundiales.