En julio, por cuarto mes consecutivo, los consumidores estadounidenses continuaron gastando, lo que representa un buen augurio sobre el dinamismo y el crecimiento en el tercer trimestre, según datos publicados por el Departamento de Comercio.
Las compras de bienes no durables bajaron (-0.5 por ciento) por primera vez desde febrero, sin duda a causa de la reducción de los precios de la energía, en cambio los durables subieron 1.6.
“Los compradores parecen confiados y deberíamos tener fuertes gastos de consumo en el conjunto del año, impulsados por las sólidas actuaciones del mercado laboral”, subrayó Breina Uruci, de la firma Barclays Research.
“Debido a que los consumidores tienen la llave del crecimiento económico en Estados Unidos, esta es una buena noticia, luego de tres trimestres consecutivos de crecimiento decepcionante”, recordó Jennifer Lee, analista de la financiera BMO Capital Markets.
Los analistas esperan que el Producto Interno Bruto gane 2.5 por ciento entre julio-septiembre.
Punto de vista
“Esta ausencia de aceleración es un factor que puede persuadir a los dirigentes de la Reserva Federal de aplazar un alza de tasas de interés hasta diciembre”, opinó Stephen Murphy, economista de Capital Economics.
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