La alemana Angelique Kerber se impuso ayer a la estadounidense Venus Williams y se medirá con su hermana Serena, en la final de Wimbledon, en una reedición de la de Australia, en la que la número 4 mundial batió a la reina del circuito.
Kerber, quien ganó por un doble 6-4, clasificó por segunda vez en su carrera para una final de Grand Slam.
La ranqueada en la casilla 4 del mundo, quien ascenderá a la segunda posición el lunes, privó a las hermanas Williams de una primera contienda por el Grand Slam juntas desde la de Wimbledon en 2009, ganada por Serena.
Antes, Serena Williams derrotó a la rusa Elena Vesnina por 6-2 y 6-0 en menos de 50 minutos. La número 1 del mundo arrasó en la pista Central a la sorprendente rusa, quien nunca antes había llegado tan lejos en un torneo de tal magnitud.
Ahora, Serena jugará mañana por su Grand Slam 22 en el que buscará igualar el registro de la alemana Steffi Graf, poseedora del récord en la era profesional, a 2 títulos de la marca absoluta de 24, que posee Margaret Court.
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