Policías impidieron ayer, con un cordón de seguridad, que opositores pudieran llegar hasta la sede central del órgano electoral, quienes iban a exigir un referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro.
Armados con escudos, chalecos y cascos, los agentes formaron una barricada en un sector cercano a Plaza Venezuela, donde se habían concentrado los inconformes para emprender la marcha hacia el centro de la capital, a las oficinas del Consejo Nacional Electoral.
Entre la multitud, algunos fueron afectados por gas pimienta que un desconocido lanzó, aunque sin que se reportaran incidentes graves. “¡Revocatorio, revocatorio!, ¡fuera Maduro!”, gritaban algunos, con carteles contra el Gobierno y banderas del país sudamericano.
El dirigente opositor Henrique Capriles y el presidente del Parlamento, Henry Ramos Allup, encabezaron la concentración que se realizó en Caracas, pero ante el cordón policial debieron retirarse entre los empujones de las fuerzas de seguridad.
Explicación
La movilización fue la primera concentración de la oposición bajo un estado de excepción que decretó el viernes el mandatario, con el que pretende cerrar el paso a los intentos que se dan por sacarlo del poder.
Un total de 14 estaciones del metro de Caracas amanecieron cerradas, por lo que los capitalinos tuvieron problemas para movilizarse por la ciudad.
El vicepresidente Aristóbulo Istúriz llamó a la oposición a esperar las elecciones de 2018, si quiere relevar al presidente Nicolás Maduro.
Otra voz
El secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, acusó a Maduro de traidor del pueblo y advirtió que se transformará en un “dictadorzuelo” si impide el referendo revocatorio empujado por la oposición.
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