Los nubarrones sobre el crecimiento mundial y la imparable cadena de atentados yihadistas en todo el mundo empañaron ayer la inauguración del Foro Económico Mundial de Davos.
Los organizadores escogen cada año un tema diferente, en esta ocasión la denominada Cuarta revolución industrial, con la impresión en tres dimensiones o las nuevas fuentes de energía alternativas como faros de la economía del futuro.
Pero “como sucede a menudo en Davos, el tema es pirateado por los acontecimientos mundiales, en especial lo que sucede en China, donde el crecimiento está aflojando”, advirtió Nariman Behravesh, jefe economista del gabinete británico IHS.
En ese contexto, el gigante asiático solo crecerá 6.9 por ciento este año, su peor cifra de los pasados 25 años. Brasil, que también mandará a su nuevo ministro de Economía para vender tranquilidad, seguirá en recesión en 2016, según las recientes perspectivas del Fondo Monetario Internacional.
Invitados
La seguridad se incrementó en Suiza, por la visita del vicepresidente estadounidense, Joe Biden y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
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