La depuración en la Policía Nacional Civil (PNC) continuará y, siguiendo la línea establecida por el presidente Jimmy Morales que ha declarado cero tolerancia a la corrupción, las acciones se han intensificado este año, anunciaron las autoridades.
En este sentido, de enero a la fecha la Inspectoría General de la PNC ha trabajado en 663 expedientes disciplinarios contra igual número de agentes, de los cuales 552 han sido identificados como posibles autores de hechos anómalos denunciados.
Edwin Leonel López Ramírez, jefe de esa unidad, indicó que con estas acciones se da cumplimiento al Acuerdo Gubernativo 420-2003, que contiene el Reglamento Disciplinario de la institución.
Se interviene cuando algún elemento se ve involucrado en hechos delictivos, los cuales son motivo de persecución penal o sanción administrativa. Los castigos se clasifican en leves, graves o muy graves, explicó López.
“Dependiendo de la magnitud de la falta cometida, y si esta constituye un delito penal, se trabaja con el Ministerio Público”, agregó.
Wálter Menchú, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales, consideró que el trabajo de la Inspectoría es importante, “porque la idea es sacar a los malos agentes de la institución”.
Delitos
López informó que se ha capturado a 93 policías, entre ellos 11 por violencia contra la mujer, 8 por incumplimiento de deberes, 7 por abuso de autoridad, 6 por tráfico de drogas, 5 por extorsión, 2 por agresión e igual número por violación. El resto por faltas leves.
Para hacer efectivas las detenciones, las autoridades se basan en las denuncias de los guatemaltecos afectados. Algunas son recibidas personalmente y otras de manera confidencial o anónima, a través de la línea 110 o el programa Cuéntaselo a Waldemar.
Las alertas deben hacerse primero del conocimiento del Ministerio Público y después de la Inspectoría General. De enero a junio, 374 víctimas han hecho personalmente los señalamientos y 69 por escrito, para un total de 443 sindicaciones.
El inspector indicó que las denuncias que ingresan de una fuente anónima pasan por un primer filtro, donde se analiza y se llama al número de teléfono desde el cual hicieron la llamada, para corroborar si existen bases para ser investigadas.
Luego se inician las pesquisas y se recaban las pruebas para determinar si hubo o no participación del agente en el hecho; de confirmarse, se abre el expediente disciplinario y se analiza durante dos meses, posteriormente se traslada al Tribunal Disciplinario Central, donde se determinan las sanciones.
Oswaldo Samayoa, del Centro de Estudios de Guatemala, afirmó que el papel de la Inspectoría permite controles administrativos adecuados. Estas acciones son positivas, pues “si no se fortalece la Policía Nacional Civil su trabajo no estará al nivel de lo exigido por el ciudadano”.
López aseguró que con la captura de los malos agentes se está saneando la institución. “El objetivo es que quede en función únicamente el personal que está trabajando apegado a derecho y en favor de los guatemaltecos”, concluyó.
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