Las escenas de dolor y tristeza se convierten en esperanza y victoria, al final de cada acción.
Aunque el cansancio sea evidente, tras largas horas de labor, la moral, la disciplina y el ánimo están al tope entre hombres y mujeres, servidores públicos y voluntarios, quienes desde el martes último hacen tareas de búsqueda, rescate, traslado y asistencia humanitaria en las áreas de devastación por la depresión tropical Eta.
Desde Izabal hasta Petén, de Chiquimula a Zacapa, de Jutiapa a Santa Rosa, de El Progreso a Alta Verapaz y de Quiché a Huehuetenango, los departamentos más golpeados por el fenómeno atmosférico, se repite la misma escena: desesperación y esperanza entre las víctimas, lucha férrea entre los rescatistas y victoria para todos.
En estos escenarios puede más el coraje, la voluntad y la solidaridad. Esa es la mística entre el personal de la Coordinadora Nacional para la Redacción de Desastres (Conred), que aglutina a las instituciones del Estado y cuerpos de socorro, cuya tarea es responder a las emergencias.
5
días se cumplen hoy, desde que comenzó la emergencia en el país.
2
entidades de seguridad participan en las labores humanitarias.
3
son los departamentos con mayor impacto de la depresión tropical.