La Junta Monetaria anunció ayer que mantendrá por los próximos tres meses la denominada tasa líder en 5 por ciento. El presidente de la Junta y del Banco de Guatemala, Álvaro González Ricci, dijo que las condiciones no ameritan una baja ni un incremento, pues la meta de inflación prevista para este año, en 4 por ciento, con un margen de un punto porcentual al alza o a la baja, no muestra riesgos.
A marzo, el costo de vida había subido 3.45 por ciento en relación con el mismo mes del año anterior. El funcionario también expuso que el resto de indicadores como el crecimiento del crédito bancario al sector privado y las tasas de interés se mantienen estables, acordes con las proyecciones oficiales.
Entre 2020 y principios de 2022, las autoridades monetarias mantuvieron la tasa en 2 por ciento. Posteriormente y, de manera gradual, la subieron hasta ubicarla en un 5 por ciento en febrero de 2023.
Para este año el crecimiento del Producto Interno Bruto se estima en un 3.5 por ciento, similar al del año anterior. Esto también se explica por el incremento de las remesas familiares, el crédito bancario al consumo y el hipotecario. Según analistas, Guatemala debiera crecer de manera sostenida el 6 por ciento.
La tasa líder es la recompensa que paga el Banguat a cambio de recibirle dinero a las entidades financieras que no tienen en qué invertirlo. A pesar de las tensiones geopolíticas, se mantienen las perspectivas de crecimiento mundial, tanto para 3.5 por ciento en 2024 y 3.6 en 2025.
Renuncia jefe de la IVE
También, se informó de la renuncia del Intendente de Verificación Especial (IVE), de la Superintendencia de Bancos. En su lugar fue nombrado Carlos Monroy Véliz. Además, dimitieron Hugo Daniel Figueroa, intendente de Supervisión y Normativa, y Byron Vinicio Méndez, intendente de Estudio y Normativa Financiera. Todos argumentaron motivos personales.