Con el apoyo de 10 organizaciones sin fines de lucro, Pollo
Campero convirtió sus tradicionales luces pirotécnicas navideñas en raciones de alimentos que iluminaron a por lo menos 80 000 personas en los 22 departamentos del país.
Rodolfo Lambour, director de operaciones de Campero, explicó que se efectuaron 175 actividades, en los cuales se entregaron 80 000 menús del sabor Campero. Este proyecto reemplazó el espectáculo de juegos pirotécnicos con el objetivo de prevenir y resguardar la salud de los connacionales. “Las últimas dos semanas fueron de mucha emoción para la familia Campero, ya que vivimos la esencia de las luces al compartir con miles de personas en diferentes partes del país”.
Lambour añadió que para lograr la entrega de las 80 000 raciones se contó con la colaboración de World Vision, Aldeas Infantiles SOS, Asociación Passion, Camino Seguro/Safe Passage, Child Fund, Familias con Futuro, Fe y Alegría, Fundación Paiz, Helps International y One Way Community OMG. “Fue un año especial para Pollo Campero”, enfatizó.
