El descenso de lahares de los volcanes de Fuego y el Santiaguito, a consecuencia de las lluvias de las últimas horas, mantiene en alerta a las
autoridades de emergencia.
Según el Instituto de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), en el volcán de Fuego los flujos de agua y sedimientos caen por las barrancas Seca y Mineral, hasta de un ancho de 25 metros.
En el caso del Santiaguito, se han producido lahares que corren por la barranca del río Cabello de Ángel, afluente del río Nimá 1. Estos llevan consigo ramas de árboles, rocas y material volcánico, y también se prevé que ocurran lahares que se viertan en los ríos San Isidro y Tambor e incrementen el caudal del río Samalá.
Mientras tanto, el Insivumeh reporta flujos de lava que descienden del cono del volcán de Pacaya, los que que se desplazan hacia el oeste y noroeste del Cerro Chino y generan avalanchas debido a que la pendiente es más pronunciada, sin que hasta ahora signifique peligro. • Gustavo Villagrán