Luchar juntos contra los flagelos que azotan a los guatemaltecos, como la violencia, la impunidad y la corrupción, considerados los cánceres de la sociedad, se han propuesto los tres poderes del Estado y el Ministerio Público, con la firma de la Política Criminal Democrática del Estado de Guatemala 2015-2035, presentada ayer.
La iniciativa fue diseñada de manera estratégica para sentar las bases de combate a esos males, y responde a la demanda de la ciudadanía que, como lo dijo el presidente Jimmy Morales, ya no tolera más daños al país.
La Política tiene como fin establecer una respuesta técnica, científica y específica, que promueva soluciones para el combate al crimen organizado y delitos más recurrentes. Se fundamentará en la prevención, investigación, sanción y reinserción social de las personas que incurran en diferentes delitos.
Además, prioriza el combate del crimen organizado, narcotráfico, tráfico de armas, contrabando aduanero, trata de personas y las extorsiones, y se enfoca en hechos contra la vida, el patrimonio, la violencia contra la mujer, delitos contra la integridad de los niños, niñas y adolescentes, así como los que atenten contra la seguridad y libertad de las personas.
La importancia de este instrumento radica en que, además de la intervención de los organismos de Estado, comprende el aporte de otros sectores, entre ellos las autoridades indígenas, representantes académicos, la cooperación internacional y los centros de investigación.
Esta y otras propuestas, como el llamado al diálogo para la reforma judicial, en el cual están involucrados el Ejecutivo, Legislativo y Judicial, surgen un año después de los acontecimientos que cambiaron el rumbo político del país, y son el reflejo de que las instituciones públicas están decididas a continuar enderezando la ruta del barco que un día estuvo a punto de naufragar.
El éxito de la iniciativa depende de que cada uno de los signatarios cumpla la responsabilidad asumida. Con la unión de esfuerzos convertirán esta herramienta en una oportunidad para erradicar los flagelos que afectan a la ciudadanía, y construir un mejor país.
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